Egun on,
Lehenengo eta behin eskerrak eman nahi dizkizuegu aurkezpen honetara etortzeagatik.
Gaur hemen elkartu gara “Emakumeen Nazioarteko Eskubideen Auzitegia. Viena+20, Euskalherria 2013”, atera berri dugun argitalpena aurkezteko.
Aurkezpenen honetan Ararteko, Emakunde eta Mugarik Gabe gaude. Emakunde eta Arartekok ekainean burutu zen auzitegian parte hartu zuten behatzaile gisa, euren helburua auzitegia baliozkotzat jotzea izanik eta bertan agertutako emakumeen eskubideen aldeko borroka ezinbestekoa dela berretsiz.
El tribunal Internacional de Derechos de las Mujeres fue una iniciativa de MG a la que se sumaron 24 colectivos de diferentes sectores, feministas, sindicales, sociales, de cooperación.
Este tribunal se desarrolló en junio del año pasado y fue un acto que buscó justicia simbólica para ocho mujeres que habían visto vulnerados sus derechos, a su vez era también la búsqueda de justicia para muchas mujeres que día a día ven vulnerados sus derechos en experiencias similares.
El Tribunal estuvo constituido por un Jurado Internacional compuesto por personalidades de la academia, organismos internacionales, movimiento feminista y del ámbito judicial. Así como por observadores de instituciones entre otros Emakunde y Ararteko que hoy nos acompañan.
Durante el tribunal se sucedieron testimonios de mujeres que habían visto vulnerados su derecho al aborto, su derecho a un nivel de vida digno y su derecho a una vida libre de violencia. Estas mujeres procedían de varios lugares estuvieron presentes mujeres vascas, salvadoreñas, guatemaltecas, catalanas y colombianas.
Estas vulneraciones fueron enmarcadas por expertas que hicieron especial hincapié en que a pesar de los innegables avances en materia de defensa de los derechos de las mujeres todavía quedan muchos ámbitos por abordar y mejorar. Como recogió el jurado al finalizar el Tribunal, los casos presentados y muchos otros similares se encuadran dentro de un sistema capitalista, militarista y patriarcal. Se trata de un sistema que sostiene y reproduce la violencia contra las mujeres de una manera específica y estructural. Un sistema cuyo objetivo principal es maximizar los beneficios y el crecimiento económico sin considerar que el fin último de las prácticas sociales debe ser la sostenibilidad de la vida.
En este contexto se da una vulneración de los derechos humanos que afecta de manera específica y radical a las mujeres que en muchas ocasiones enfrentan la criminalización por sus luchas en defensa de esos derechos, así como una impunidad sistemática.
Las tres mujeres que ejercieron de fiscal durante el tribunal señalaron las carencias, y mala aplicación de la legislación en pro de la defensa de los derechos de las mujeres. El Jurado también instó a estados y organismos internacionales a garantizar los derechos humanos de las mujeres y cumplir las normas que regulan los mismos de modo imperativo yendo más allá de las declaraciones de intenciones, y a través de políticas y medidas debidamente financiadas evaluadas y en las que participen las organizaciones de mujeres.
Señalaron también que es necesario y urgente implementar los mecanismos necesarios para que se respeten los derechos de las mujeres, garantizando la educación y la atención en salud sexual y reproductiva y el acceso libre a métodos anticonceptivos. Garantizar a todas las mujeres que lo deseen el acceso a interrumpir su embarazo de forma segura y gratuita dentro de la sanidad pública.
Urgente también sancionar específicamente todo tipo de violencia machista contra las mujeres, en todas sus formas y manifestaciones, cometida por agentes estatales o particulares. Y que los Estados asuman la responsabilidad frente a estos abusos y violaciones y pongan en marcha los mecanismos necesarios para la prevención, investigación y el castigo de la violencia, así como el derecho de las víctimas sobrevivientes a la reparación.
En estos tiempos de recortes de derechos de orden económico e ideológico pensamos que este documento cobra relevancia para conocer cómo afectan estos recortes a la vida de las mujeres, al respeto de sus derechos humanos.
Nos preocupa e indigna que haya mujeres en cárceles por aborto, en algunos casos por abortos espontáneos, mujeres desplazadas y perseguidas incluso por parte de empresas trasnacionales que se instalan en sus territorios, mujeres violadas en comisarías y CIEs, mujeres que se ven obligadas a una maternidad obligatoria, mujeres que ven aparcados sus derechos laborales por haber sido madres, por ser mujeres migradas. Mujeres discriminadas por su opción sexual, mujeres que buscan justicia en sus instituciones que las ignoran.
Por ello sigue siendo necesario el movimiento en defensa de los derechos de las mujeres y la implicación activa de los colectivos sociales, ciudadanía e instituciones.